En el mediodía de ayer, la sede de la Conmebol fue el centro de atención del ámbito del fútbol ya que allí se sortearon los cruces para los octavos de final de las dos competencias más importantes del sur del continente. Por la Copa Sudamericana, Rosario Central se enfrentará al Deportivo Táchira de Venezuela.
El equipo aurinegro integró el Grupo B de la Copa Libertadores junto a Olimpia de Paraguay, Internacional de Brasil y Always Ready de Bolivia. Logró clasificarse a esta instancia siendo tercero en su zona y quedó ubicado como el mejor de los ocho equipos que pasaron de Copa Libertadores a Sudamericana en esa condición.
Apenas se conoció el rival que tendrá Central en esta nueva instancia, la sensación en los hinchas fue de conformidad ya que se evitaron rivales que, a priori, asomaban como más competitivos. Aún así, esto es fútbol y todo puede pasar, por lo tanto, no se debe subestimar a ningún rival. En cuanto a la logística, en esta ocasión le tocó el viaje más largo de todos los que había posibles en este nuevo sorteo.
Táchira es uno de los clubes que más participaciones internacionales ha tenido dentro de los que representan al fútbol venezolano y uno de los datos que más se destacó de ellos es su fortaleza cuando juegan de local, ya que ganó sus tres partidos por la Copa Libertadores 2021 en esa condición. Sin embargo, cambian rotundamente su imagen cuando les toca ser visitantes, ya que en sus excursiones no pudieron conseguir ni siquiera un empate. El equipo cosechó tres derrotas y le han convertido muchos goles.
Deportivo Táchira 3 – 2 Olimpia
Internacional 4 – 0 Deportivo Táchira
Always Ready 2 – 0 Deportivo Táchira
Deportivo Táchira 2 – 1 Internacional
Deportivo Táchira 7 – 2 Always Ready
Olimpia 6 – 2 Deportivo Táchira
Esta llave eliminatoria tendrá su comienzo en Venezuela cuando ambos equipos se enfrenten en el Polideportivo de Pueblo Nuevo, ubicado en San Cristóbal, y será dentro de los días 14, 15 ó 16 de julio, según lo definan los organizadores, mientras que el partido de vuelta deberá jugarse en el Gigante de Arroyito (u otro estadio dentro del territorio argentino), una semana después.
El sueño del pueblo centralista está intacto y el camino copero invita a creer que se puede seguir avanzando hasta lograrlo.