Este viernes 19 de agosto falleció a los 81 años Oscar Bergesio, uno de los periodistas deportivos más reconocidos de Santa Fe. El “Flaco” fue una de las voces más icónicas de la región y su huella quedará para siempre en el corazón de todos los amantes del fútbol.
Bergesio fue comentarista durante más de 30 años en Radio LT10 y también trabajó en Radio LT9 y en el Diario El Litoral, entre otros medios.
En este contexto, el periodista Gustavo “Turco” Mazzi (ex compañero de trabajo del “Flaco”) le dedicó estas sentidas palabras en sus redes sociales:
¿Alguien dijo hoy que murió Oscar Bergesio? ¡No es cierto! ¡Por favor díganme que no!
Oscar Bergesio vivirá por siempre en cada palabra bien pronunciada, en cada gesto honesto, sensible, dedicado, delicado de cada periodista deportivo de la ciudad.
Bergesio será siempre la expresión máxima del fútbol bien contado. Es el comentarista con una receta propia muy sencilla, que mezcla poesía, alegría y un toque de romanticismo por la pelota. El Flaco es barrio, es potrero, es tango, es la barra de amigos, pero por sobre todas las cosas, Bergesio es la palabra justa como herramienta fundamental de comunicación en un devaluado periodismo deportivo. Es único. Un caso que no tiene parangón. Una relación distintiva entre la inteligencia, el humor y el conocimiento. Todo en la misma persona.
Habló siempre claro, con perfecta puntuación, impecable conjugación y una conceptualidad tan redonda como la misma número cinco. Admirable como el tipo juega a un toque y, con seis frases, se acerca tanto a la belleza. Es que este buen SEÑOR (en mayúsculas y con todas las letras) es arte. Bergesio es un universo en sí mismo; es “un cacho grande” de la pasión más popular de la ciudad. En él conviven con plena naturalidad la literatura y un gol.
¿Cómo era que decía Guaraní: Si se calla el cantor calla la vida…? Si se callase su voz se callarían las transmisiones, y eso no ocurrirá jamás. Seguro que todos los medios en general, la radio en particular; pero fundamentalmente la gente de Santa Fe toda, le guardará por siempre un lugar de privilegio en sus corazones, y desearán tanto como yo, volver a escucharte una y otra vez.
Por eso, nunca te diremos adiós Flaco querido, porque un adiós significa irse, e irse significa olvidar… y nadie que te haya escuchado alguna vez, piensa olvidarte jamás. Como yo, que conservo el deber de la memoria y he de tener la honestidad de recordarte para toda la vida…¡gran maestro OSCAR BERGESIO!
Te quiero Flaco, y no estoy llorando, se me metió un comentario tuyo en el ojo… Ya pasará.
