Rosario Central hizo los deberes ante Sarmiento y ganó los primeros tres puntos de la era Tévez de manera justa y merecida. Fue por uno a cero en un partido luchado, en el que el local jugó con un jugador más durante 60 minutos.
El DT había realizado varias modificaciones en el equipo y los futbolistas que se presentaron ante la masa auriazul cumplieron aceptablemente.
Sin lugar a dudas, la figura excluyente del partido fue Facundo Buonanotte, el chiquilín surgido de inferiores fue quien marcó el desequilibrio con su gambeta y además, fue el autor del gol del triunfo.
Claro que aún falta mucho por mejorar para conseguir un funcionamiento colectivo que permita tener otra regularidad, pero ganando, todo es más sencillo.