No le salió una al equipo del Kily González en la tarde del sábado y cayó derrotado 4 a 1 ante Huracán. La cantidad de errores defensivos (una constante a lo largo del ciclo), fueron capitalizados por los jugadores rivales y eso se reflejó en el abultado resultado final.
Desde este espacio, siempre marcamos la irregularidad del equipo a lo largo de toda la temporada y ante el globo, quedó nuevamente evidenciado. Perdió la chance que tenía para clasificar a la Copa Sudamericana y dejó una imagen muy preocupante pensando en lo que viene.
El propio DT, con la calentura lógica después de la derrota, declaró en conferencia de prensa y afirmó: “jugamos horrible” y luego, con contundencia agregó: “no estuvimos a la altura de lo que nos jugábamos”.
Ahora, ya con el Kily ratificado como DT para la próxima temporada, habrá que ser precisos en el libro de pases e incorporar futbolistas en puestos claves, de la mayor calidad y jerarquía posible. Basta de improvisaciones que se terminan pagando muy caro.
Los juveniles que fueron apareciendo en el primer equipo, tendrán la chance de consolidarse pensando solo en la competencia a nivel local. Eso puede verse y analizarse como positivo, ya que la experiencia de este año indica que no había plantel para la doble competencia.
Barajar y dar de nuevo, rearmar el plantel y reforzarlo correctamente será la premisa del Kily, el manager deportivo y los dirigentes. Central y sus hinchas, se merecen mucho más.